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"Vicente Celestino Duarte" Tempera de huevo y transparencias en oleo sobre madera 24" x 18", 2019
Hace unos años, mientras buscaba en Internet, me encontré con una foto antigua, la persona que la publicó declaró que era Juan Pablo Duarte joven, (Duarte junto con Francisco del Rosario Sánchez, Matias Ramón Mella fueron los tres padres de la patria). Los ideales de independencia de Duarte comenzaron el movimiento que resultó en la independencia de la nación dominicana. Me intrigó y lo guardé para una pintura futura ya que nunca había visto una imagen de Juan Pablo Duarte a temprana edad.
El año pasado, cuando comencé a trabajar en esta pintura, quería confirmar la autenticidad de la imagen y descubrí que no era Juan Pablo Duarte; en realidad era una imagen de su hermano mayor Vicente Celestino Duarte en su juventud. Después de leer sobre él, supe que él también jugó un papel importante en la independencia de la República Dominicana, así que decidí continuar con la pintura.
Nacido en Mayagüez, Puerto Rico, Vicente Celestino formó parte de la sociedad secreta La Trinitaria. Que era una sociedad fundada por Duarte con la esperanza de aumentar el nacionalismo y difundir sus ideas separatistas de Haití. A pesar de tener una posición económica privilegiada y negocios a los que dedicarse, decidió continuar la lucha por la independencia junto a los trinitarios. Formó parte de las filas que lucharon por defender la soberanía, junto con Francisco del Rosario Sánchez.
Cuando el general Pedro Santana asumió el poder en 1844, Vicente Celestino se vio obligado a exiliarse debido a su participación activa en el movimiento de liberación. Pasó su exilio en los Estados Unidos y Venezuela hasta 1848 cuando el Congreso Nacional Dominicano permitió el regreso de los exiliados del movimiento de liberación.
En 1857, fue nombrado diputado de la Asamblea de Revisión de Moca, que reformó la constitución en un sentido liberal. Regresó al exilio con su hermano Juan Pablo con la anexión de República Dominicana a España, decisión política a la que también se opuso.
Pronto regresó al país para unirse a la lucha restaurativa en la que continuó desempeñando un papel muy importante y ganó el respeto y la admiración de muchos de sus colegas en la lucha.
Murió en 1865 en Santo Domingo, en su honor hay bustos y calles del país que llevan su nombre.
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